Cualquier adicción es una carga que fue ganada por locura, pero la peor de mis adicciones ahora es tu hermosura.
Y qué puedo yo hacer si eres toda una ricura que me está llevando hasta la locura; Lo que peor sería, que en vez de obsesión ya me esté enamorando.
Oh si tus labios yo pudiera besar, creo que mi corazón eloqueceria y mi alma volaría porque vaya que me invitan a soñar.
Porque tu boca me provoca y si te volteas de espalda me levantas las ganas.
Es que tus labios son un detonante, causa que mi pensamiento, se pare en un instante.
En mi mente y corazón, ahora tu eres una adicción.