Paso

Cuando eras mar; él  lluvia impetuosa, uniéndose a tu inmensidad.

Él, viento suave y fuerte, sacando tus olas de control.

Aquel torrencial, se perdió en los abismos de tu inmensidad.
Aquella atracción, tormentosa relación; la libertad de sus vientos, tus costas enfureció.

¿Poca pasión, mucha inseguridad, o pasados de intensidad?

De él, oscuros deseos, nubes densas, emociones fuera de control.
Y el desenfreno de los tuyos, olas rompiendo su frágil imperfección.

Fuerzas amenazando con provocar estragos; el principio de un final.

Luz de luna a plenitud, no se contempló, por nublar la razón, ni se sabe si tuvieron luz de esperanza alguna.

Querer detener el tiempo, para poder empezar de nuevo; no fue opción.
Cada minuto cuenta y el tiempo les cerró el telón.

Un tal vez, para otra oportunidad, caducó.
Sin remedio, cual niebla se disipó, con el conteo de los segundos en el tiempo.

Algo que murió rápido y lento; el más allá se apoderó del momento.
Un adiós, sin decir adiós.
Sin luz de luna, menos de sol; la oscuridad los consumió.

El renacer y muerte, de dos cuerpos en atracción.
Y de lo que fue, ¿quién mostró dolor?
Fue un final, en verdad, liberador.