La distancia

Desde la distancia y en silencio, casi en un vacío inmenso, por la incomprensible soledad y en agonía de deseos, así es como contemplo tu elegancia.

Quise volar a la distancia, tan alto, por donde un lindo ángel pone su nido, su glamurosa estancia; mas descubrí que sólo era mi demencia. 

Temerarias; mis acciones fueron arriesgadas, y me falló mi olfato, por mi ignorancia, porque jamás pude oler de cerca tu fragancia, incluso me funcionó mal la mente y quedé como demente, calcule mal y la caída fue con importancia.

Verdaderamente que me faltaron las fuer$as para alcanzar su nido, que pena por lo ocurrido, y no son sólo excusas,  llegué a pensar que mi ser le perturbaba y callé porque me importaba.

Y me importas, pero ahora seguiré en silencio allí, a donde me llevó el viento a rrastras, aunque me importa la distancia, desde ahí, estaré sin esperar, ni pedir nada, para no pasar el límite de tu tolerancia. 

Y después de un poco decir, siempre digo que te admiro porque me atrapa tu alma en ty mirada, y desde aquí y en total silencio, desde la distancia, seguiré observando tu elegancia. 

Vida

Yo se que me haz devuelto la vida,  más de lo que pueda llevar la cuenta. 

Y aunque yo no lo merezca, lo haces por amor y paciencia. 

Porque quieres que yo pueda llegar a tu lugar y disfrutar de tu presencia. 

De tus amores por la eternidad. 

Perdona que siempre te enfurezca. 

Mas, ayúdame a llegar hasta a ti, por difícil que a mi parezca. 

Que sea tu amor, de mi fe la fuerza, y tu misericordia, la templanza de mi esperanza. 

Que no se acaben, aunque la oscuridad me envuelva o me alcance. 

Que tu luz abrace, proteja y acaricie mi alma, en donde sólo tu puedes tocar.

En donde podría verte frente a frente. 

Y que a pesar de todo, pueda rendir sólo a ti, mi alabanza. 

Porque sólo tu eres la vida misma.

Maduro y no Perfecto

No tiene que ser perfecto

Dejemos cualquier tontería de lado

Una buena convivencia sea nuestra prioridad 

Que la madurez sea nuestro abogado 

Y la perfección no busque defectos

Porque con creatividad y formalidad

Jamás serán un problema entre los dos 

Los juegos que jugaremos o los juguetes que usaremos 

Y aunque sólo sean por defecto 

Maduremos, no tiene que ser perfecto

Aprendiendo a madurar, te dejo en libertad

Porque entiendo que no puedo darte lo que pides

Y aunque quiero, no esta en mi poder dártelo y con sinceridad, aunque duele, debo partir de tu lado 

Creo que es parte de alcanzar de a poco la madurez aunque el proceso me está matando, creo que estoy madurando. 

Ave de paso.

Te vi y en un instante, sentí un bonito palpitar.

Aquí en mi corazón, ya te hacia un buen lugar.

Me quise enamorar, te quise enamorar.

Pero en esto del amor, es necesario que hayan dos.

Mas tu mente y corazón te quedaron atascados.

Me di cuenta de mi error, cuando ya te estaba amando.

Y no entiendo de verdad.

A qué estamos jugando.

Pero el tiempo se me va, y me pareces ave de paso.

No sabes bien que yo, estaba imaginando.

Que te podía amar.

Y me estaba haciendo daño.

Me gustas es verdad y no puedo negarlo.

Ya no puedo jugar.

Aún no te has enamorado.

No quiero desperdiciar, mi tiempo en un engaño.

Ni la energía de mi amor, en un ave de paso.

No se fuerza al amor, ya te voy olvidando.

Y mañana en mi serás, recuerdo del pasado.

Porque ya lo descubrí, que sólo eres ave de paso.

Me quise enamorar, te quise enamorar.

Pero en esto del amor, es necesario que hayan dos.

Mas tu mente y corazón te quedaron atascados.

Me di cuenta de mi error, cuando ya te estaba amando.

Y no entiendo de verdad.

A qué estamos jugando.

Pero el tiempo se me va, y me pareces ave de paso.

No forzar.

Si es por obligación, no es amor. 

Si se unen con condición, no es amor. 

Si no te brinda prioridad, no es amor. 

Al amor no se le ostiga, no se presiona, si es amor, sólo se le debe dejar ser y fluir que con su poder, una fortaleza eterna puede construir. 

Para albergar a los que le dan oportunidades, en los intentos de un acercamiento y al cortejar.

Pero quien se siente ostigado, no es para ése despliegue de amor, el indicador, se debe revaluar hacia donde indican las señales de la fuerza del amor. 

Eso lo he descubierto en mi vivir y su caminar, y aquí sigo solo, pero no es que, yo haya nacido para no tener a quien amar. 

Tampoco es, que no haya nacido nadie que conmigo se rinda a los poderes del amar, es que debe ser, no busco donde tengo que buscar.

Y aunque yo insista una y otra vez, a la puerta de su corazon, si no abre o se resiste, no es para mi el calor de su amor. 

Y aunque yo quisiera obtener de su sabor, su rebatir indica que, no es para mi, otra vez a buscar, pero la esperanza, con los años se va.

No se puede, ni se debe forzar, el querer, ni el cariño, mucho menos el amor; entonces no puedo forzarlo, aunque mi amor sea de verdad.

Para jamás olvidar.

Y me propongo olvidar a quien amé en verdad. Y sólo es un consuelo falaz, mientras deja de doler, que ya no está.

Pero, tan sólo con una frase, o con una canción, con el mismo amor, le vuelvo a recordar, y ya no duele, pero vaya que le vuelvo a extrañar.

Entonces llego a la conclusión, porque en verdad fluyó de mi todo ese amor:

Jamás en esta vida podré olvidar, a quien la pureza de la energía del amor, que habita en mi, pudo extraer, porque en verdad fue puro amor; entonces, jamás te podré olvidar.