No supe exactamente cual fue tu intención.
La mía fue encontrar y darle rienda suelta al amor,
Y descubrir de la carne sus secretos y su sabor,
Pero el conocerte sólo me dejó a zozobra un sabor,
Y yo que creí que en ti había encontrado un gran amor,
Mas desconcierto, frustración y tan sólo un poquito de buenos momentos, de tu recuerdo me quedó.
Me dije, por una mentira, ni por falsedad, mucho menos por falta de sinceridad;
Yo no voy a llorar.
Mas sin embargo, descubrir que no soy tan fuerte, y eso me hizo soltar agua de mis ojos como agua del mar.
Pero no fue lo anterior lo que me causo desbordar,
Porque con seguridad, yo si que lo se.
Mis lágrimas y mi dolor, si fueron por amor, porque, no supiste recibir ni cuidar, todo lo que mi corazón te quiso entregar,
Y ya mas roto como tu lo dejaste, otro vez, me toca volverlo a remendar,
Pero ahora es peor, porque casi pierdo mi dignidad y mi argullo por intentar amar a alguien, casi a mi igual.
Pero mi consuelo es, que yo si pude entregar, sinceridad y fidelidad, descubrí que de eso soy capaz, cuando entrego amor, sin hacer caso a la razón.
No se tú, pero yo me enteré que tengo susceptibilidad a amar y a entregarme de verdad.
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